Esta es la historia de las últimas horas del antiguo alcalde de Bueu, José Gómez de la Cueva, conocido con el sobrenombre de Johán Carballeira. Nos remontamos el 16 de abril de 1937, en este día a Carballeira lo trasladan de la isla cárcel San Simón a la prisión provincial de A Parda, en Pontevedra capital.
La historia se desarrolla en la siguiente cronología cuando estalló la guerra civil. Carballeira de 33 años, permaneció escondido en Cangas, siendo detenido el 15 de septiembre de 1936 cuando estaba a punto de coger un barco con destino a Vigo, acompañado de su hermano Ángel. Lo acusaron de “auxilio a la rebelión” por ser partidario de la República.
Permaneció en primer lugar en los calabozos del Ayuntamiento de Bueu, siendo luego trasladado a la isla-cárcel de la isla de San Simón.
Se le hizo consejo de guerra el 29 de septiembre, a Carballeira, a Manuel Graña Pouseu (sindicalista), y a unos vecinos de A Portela que eran canteros y famila entre sí, Avelino Chapela Soliño y Manuel Chapela Couto. Fueron todos condenados a muerte.
Parece ser que la madre de Carballeira, perteneciente a la conocida familia Cueva en la zona y dueños del Pazo de Castrelo, consiguió entrevistarse con Franco en Burgos, intentando lograr el indulto, acción inútil, porque cuando regresó ya había sido fusilado en Monteporreiro. Porlo visto, Franco la complació, sólo por puro compromiso y buscando librarse de ella, sabiendo que la ejecución estaba ya en marcha.
Sus últimas palabras escritas se las dedicó a su mujer, y fueron descubiertas por el hermano de Lola Álvarez cuando fue a recoger las pertenencias de Carballeira a la celda después de su muerte.
En el reverso de una fotografía de su novia Lola, le deja este texto como despedida:
“Lolita Lolucha. Conserva esta foto donde escribo cuando falta hora y 1/4 para morir, a las 6 menos 1/4. Morimos a las 7, cuando te despiertes y pienses en mí, seguramente. Cueva”
