El Ayuntamiento acondicionará el acceso y la parcela en la que se sitúa el Centro de Interpretación del agua en las instalaciones del depósito regulador de abastecimiento de Pontevedra, situado en el Cimbelo, parroquia de Lérez. Esta inversión tendrá un coste de 280.097,65 euros y se hará con cargo a las mejoras del nuevo contrato del ciclo del agua que desarrolla la empresa Viaqua.
En la actualidad este centro de interpretación dispone de muy difícil acceso desde la carretera al Castelo, en la parroquia de Lérez. La intención es mejorarlo ampliándolo, creando rampas y también escaleras en distintos tramos para acceder hasta el final. Instalar iluminación y aprovechar sobre-anchos en el acceso para fijar zonas de descanso con bancos.
El resto de la parcela también será tratada con césped, arbolado y se instalará una zona de juegos vinculada con el agua.
El objetivo es abrir esta instalación creada en el año 2008 a toda el vecindario. Tal vez esté más enfocada a los escolares, pero el propósito del Ayuntamiento es que cualquier vecino que quiera conocer estas instalaciones pueda hacerlo, de ahí que se trabaje en la implantación de un sistema que facilite estas visitas.
Un depósito y un museo
El Centro de Interpretación de Lérez consta de un gran depósito de agua de 1.673,21 m2 de superficie y de una edificación anexa que funcionaba como zona de acceso al interior de el depósito y como vivienda de la persona encargada del mantenimiento o guardia, y que tiene una superficie construida de 216,44 m2.
Esta última construcción es la que acoge el centro de interpretación. Se estructura en varias salas en las que cada una trata un ámbito específico relativo al agua: el agua en la naturaleza y en la vida cotidiana, el agua como recurso y el ciclo del agua. Es, en realidad, un taller de ciencias con aparatos interactivos en el que desarrollar actividades.
El deposito de agua de Lérez tiene forma rectangular. Una parte del mismo se encuentra semienterrado con muros de contención de mampostería y otra parte superficial que sobresale 3,5 metros sobre la cuota del terreno y está cubierto en su totalidad por un forjado de hormigón apoyado en pilares.
Se accede al interior por una pasarela elevada sobre del nivel del agua que se acumula en el mismo. Desde esta pasarela, se puede contemplar en toda su extensión la masa de agua acumulada mediante aportaciones procedentes del diferentes manantiales. El interior está acondicionado con juegos lumínicos y de agua para incidir y centrar la atención en las diferentes posibilidades que el agua tiene en la mejora de la calidad de vida de las ciudades.
Este centro sirve para hacer comprender a los ciudadanos, y particularmente a los más pequeños, la importancia del agua para la vida y el desarrollo de la sociedad así como la problemática derivada de su uso y la necesidad de un consumo racional y cuidadoso.